Las redes sociales no son responsables de lo que se dice, se comparte y se informa en ellas cada día

Manuel Carrillo Comunicación Corporativa y Negocios Digitales

Análisis de Manuel Carrillo, Director de Estrategia de Grupo Reputación Corporativa en su Blog Profesional

Madrid, 2 de abril del 2014- Dos latas. Un hilo. Un ser humano sujeta una lata. Otro ser humano sujeta la otra lata. Hablan, emiten sonidos, mensajes. ¡Milagro¡. La comunicación entre personas se ha producido. Se inicia una conversación:

Persona 1: “Oye estoy mirando por la ventana y ese vecino tan simpático acaba de…”

Persona 2: “No me digas que ha….”

Persona 1: “Díselo a todas-as que ese vecino tan simpático es un…”

Persona 2: “Según me lo contabas me ha escuchado mi cuñado y ya se lo ha dicho a…”

La reputación personal de “ese vecino tan simpático” sufre una crisis en este momento. Una pregunta:

¿La responsabilidad es de dos latas y un hilo?

Bajemos la metáfora a la realidad. Una información no confirmada y publicada en Twitter esta misma tarde:

Manuel Carrillo

Un ser humano que trabaja en el servicio público 112 Canarias publica este tweet: “Control Canarias confirma caía al mar de avión a 2 millas costa #GRANCANARIA a la altura de Jinámar. Se desconoce el número de pasajeros”. Lo he vuelto a escribir para creerme que un ser humano es capaz de escribir una alarma tan grave, (influidos todos por el vuelo de Malasia) y además le de tiempo a escribir un hastag. Como si buscara que otros seres humanos aportaran más información desde el fondo del mar o en superficie. Y como vemos, ya había conseguido 311 RTs y 42 favoritos.

Al final, todo ha sido una falsa alarma, lo que parecía un barco auxiliando a un avión accidentado en alta mar, sólo era un barco auxiliando otra embarcación. Las críticas gratuitas a Twitter no se han hecho esperar:

Manuel Carrillo

Esta imagen corresponde a la portada de http://www.elmundo.es, el primer o segundo portal informativo de España, dice que “dos latas y un hilo” tienen la culpa de publicar una noticia falsa. Nada de la comunicación que se desarrrolla cada segundo, en cada metro de este planeta, es responsabilidad de las redes sociales. Nada. Ya sabemos que no es la primera vez que ocurre esto. Y seguro que va a ocurrir en el futuro. Sin embargo, el trabajo del periodista aquí es esencial para confirmar, contrastar en 2 ó 3 fuentes diferentes, la comunicación, la información que aparece en las redes sociales. Resulta lamentable que siendo conscientes de esta realidad el periodista, los medios de comunicación, estén viviendo la mayor crisis de toda su Historia. Los mercados son conversaciones, pero el periodista debe discriminar qué conversaciones son noticia para el resto de seres humanos.

Los mercado no son noticias hasta que los profesionales de la información hacen su trabajo y nos cuentan realmente lo que está acontenciendo. Ya hablaremos otro día de la linea editorial de cada medio de comunicación, sus intereses empresariales, políticos, etc. Pero o nos fíamos de los medios de comunicación profesionales, como hemos hecho en el Siglo XX y nos ha ido muy bien, o nos inventamos otra alternativa informativa. No hablo de conversaciones, rumores, cotilleos y mensajes baldíos.

Las redes sociales son el canal de comunicación mas potente que ha tenido el ser humano jamás. Pero eso no quiero decir, ni muchísimo menos, que todo lo que aparezca en una red social sea verdad, cierto, verídico, veraz. Por una sencilla razón, porque en las redes sociales hay seres humanos. Ni más, ni menos.

Lógicamente, (las latas y los hilos) las redes sociales tienen sus responsabilidades, derechos y deberes. Deberán cumplir las leyes vigentes en cada región, no fomentarán actos delictivos, todo lo contrario, ayudarán a perseguirlos. Vigilarán la seguridad y protección de los datos. Etcétera. En cualquier caso, el autor del hastag #GRANCANARIA dentro de un tweet anunciando un grave accidente…por favor que deje el teclado, se haga con dos latas vacíás con un hilo…y hable consigo mismo.

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *