Madrid, 4 de marzo del 2014.-  El tuit más retuiteado de la historia (hoy supera ya los 3 millones de RTs) es el selfie que se marcó Ellen Degeneres en la 85º Gala de los Oscar de Hollywood (2014). Le quitaba así el record al sencillo tuit que escribió el presidente americano Obama al ser reelegido presidente, con una fotografía abrazando a su esposa. Ahora nos planteamos: ¿Qué le interesa más a los ciudadanos de todo el mundo, la 85º Gala de los Oscar o un selfie con famosos?. Los números cantan y el espontáneo selfie de Ellen Degeneres gana. ¿Pero fue un selfie natural o estaba programado entre las acciones de Samsung al lucir la presentadora un modelo de esta marca durante la gala?.

Samsung invirtió 24 millones de euros en publicidad durante la 85º Gala de los Oscar de Hollywood. La presentadora, Ellen Degeneres, mostró en varias ocasiones un modelo de esta marca para escribir tweets durante la retransmisión. Por lo tanto, quizás su selfie no fue producto del azar, sino más bien de una acción más dentro del patrocinio publicitario. Lo que seguro nadie tenía planificado es que iban a producir el mensaje de 140 caracteres más “viralizado” de la Historia, hasta marzo del 2014.  Pero hay más reflexiones que nos podemos plantear:

1. A la hora de planificar un evento, no de la dimensión mundial de los Oscar, ¿sabemos exactamente lo que le interesa a nuestro público asistente?.  Al fijar los objetivos del evento, hay que determinar a qué publico impactamos, cómo y el resultado a monitorizar.
2. ¿Qué viralizó el selfie de Ellen Degeneres, la retransmisión en televisión, o la participación de varios famosos con sus respectivas cuentas de Twitter?. La Gala de los Oscar no solía arrastrar audiencias millonarias en los últimos años. Por lo tanto, nos inclinamos al efecto viralización en la propia herramienta de Twitter.
3. ¿Es interesante que sea más noticia la presentadora de un evento que el propio evento?. Nunca el presentador-a de un evento puede superar en impacto mediático al evento. El conductor-a de una gala es un invitado cuyo protagonismo debe quedar por debajo del evento. Lo mejor es una trabajo previo y un guión sólido que nadie se pueda saltar. 
4. Los eventos hay que celebrarlos sólo en persona, o se necesita una retransmisión en streaming (Internet). Este asunto es delicado para muchas empresas y organizaciones. Hasta ahora se piensa que la retransmisión en streaming quita asistentes en persona. Sin embargo, el público asistente a un evento tiene unos fines muy diferentes que el público que lo ve desde la oficina o su casa. Para dar estructura al impacto en tiempo real, con las redes sociales, una retransmisión en streamign siempre es recomendable.
5. Evento transparente sin miedo a las opiniones. Un evento con 200 invitados con 200 smartphones es radicalmente transparente. Los comentarios, fotografías y vídeos que los 200 invitados pueden subir en tiempo real, no los puede parar nadie, ni nada. Por lo tanto, siendo conscientes de esta realidad, lo más sugerente es coparticipar en esa ola, y seguir monitorizar al segundo todo lo que se publica en las redes sociales. Para que un evento sea privado habrá que requisar los smartphones, tabletas y demás dispositivos (gafas, pulseras, etc.), a la entrada del local.